Estar
ocupado no es pecado. Jesús estaba ocupado. Pablo estaba ocupado. Pedro
estaba ocupado. Nada importante se logra sin esfuerzo y cansancio. Eso
no está mal. Pero ocuparse en una búsqueda sin fin de cosas que nos
dejan vacíos y rotos por adentro, eso no debe ser agradable a Dios.
No hay comentarios:
Publicar un comentario