"Simón, hijo de Juan, ¿me amas?". El le respondió: "Sí, Señor, sabes que te quiero". Jesús le dijo: "Apacienta mis ovejas". (Jn. 21, 16)
SAN EVARISTO
SAN EVARISTO (¿?-105) nació en Belén, en Palestina, en una familia de griegos-judíos, en la época de mayor esplendor del Imperio Romano y en los albores del cristianismo.
De acuerdo con la tradición, San Evaristo habría estudiado en Grecia, y posteriormente en Antioquía.
Los escasísimos datos con que contamos acerca de San Evaristo provienen del Liber Pontificalis, del siglo VI, donde se informa que ordenó a 17 sacerdotes, 2 diáconos y 15 obispos.
A diferencia de su predecesor en el papado, San Clemente I, de quien se conservan valiosos escritos propios y referencias a su persona, San Evaristo es propiamente un “papa mudo”, a quien le tocó comenzar a organizar la Iglesia, que se expandía rápidamente al concluir el primer siglo de la era cristiana.
San Evaristo fue electo papa en 97. A él se atribuye la asignación de tituli, o parroquias, a los primeros presbíteros, que eran ancianos, y a los que más tarde se les conoció como cardenales, o “ejes de la organización”.
La fuente histórica refiere que San Evaristo murió martirizado en 105 en épocas del emperador Trajano, y que fue enterrado en la colina Vaticana cerca de la tumba de San Pedro, si bien nada de esto ha podido corroborarse.
SAN EVARISTO sentó de modo silencioso las primeras estructuras organizativas de la Iglesia.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario