"Simón, hijo de Juan, ¿me amas?". El le respondió: "Sí, Señor, sabes que te quiero". Jesús le dijo: "Apacienta mis ovejas". (Jn. 21, 16)
Mc 2, 18-22
Un día en que los discípulos de Juan y los fariseos ayunaban, fueron a
decirle a Jesús: "¿Por qué tus discípulos no ayunan, como lo hacen los
discípulos de Juan y los discípulos de los fariseos?". Jesús les
respondió: "¿Acaso los amigos del esposo pueden ayunar cuando el esposo
está con ellos? Es natural que no ayunen, mientras tienen consigo al
esposo. Llegará el momento en que el esposo les será quitado, y entonces
ayunarán. Nadie usa un pedazo de género nuevo para remendar un vestido
viejo, porque el pedazo añadido tira del vestido viejo y la rotura se
hace más grande. Tampoco se pone vino nuevo en odres viejos, porque hará
reventar los odres, y ya no servirán más ni el vino ni los odres. ¡A
vino nuevo, odres nuevos!".
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