"Simón, hijo de Juan, ¿me amas?". El le respondió: "Sí, Señor, sabes que te quiero". Jesús le dijo: "Apacienta mis ovejas". (Jn. 21, 16)
Mt. 22, 15-21
Los fariseos se reunieron para sorprender a Jesús en alguna de sus
afirmaciones. Y le enviaron a varios discípulos con unos herodianos,
para decirle: "Maestro, sabemos que eres sincero y que enseñas con toda
fidelidad el camino de Dios, sin tener en cuenta la condición de las
personas, porque tú no te fijas en la categoría de nadie. Dinos qué te
parece: ¿Está permitido pagar el impuesto al César o no?. Pero Jesús,
conociendo su malicia, les dijo: "Hipócritas, ¿por qué me tienden una
trampa? Muéstrenme la moneda con que pagan el impuesto?. Ellos le
presentaron un denario. Y él les preguntó: "¿De quién es esta figura y
esta inscripción?. Le respondieron: "Del César?. Jesús les dijo: "Den al
César lo que es del César, y a Dios, lo que es de Dios?.
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